Siervos de Dios en la Política: ¿Qué dice la Biblia al respecto?

1. ¿Cristianos en la Política?

¿Qué significa la palabra política? Según la Real Academia Española, tiene su significado en: Dicho de una persona; que interviene en las cosas del gobierno y negocios del Estado.

Lo que más me sorprende es, ver que la Palabra de Dios es muy clara respecto a no involucrarse en la política; Y de manera especial, a aquellos que recibieron de parte de Dios un llamado. Dice la Palabra del Señor: “Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado.” 2 Timoteo 2:4.

Este versículo es especial, no puede ser más claro al dejar bien detallado que la voluntad de Dios es no mezclarse activamente en los negocios de la vida para a así poder agradar a aquel que nos llamó. Pueden salir por allí excusas baratas que solo los ingenuos espiritualmente se las creen.

Dichos de a aquel que se involucra, en la política:

a) Mis intenciones eran buenas, mi deseo era poder asesorar a los políticos no cristianos; sobre la Biblia mi fuerte.

b) Mis intenciones eran ayudar al pueblo, y abrir nuevas puertas para
el Evangelio.

c) Mis intenciones son honestas, yo no buscaba fama, dinero, reconocimiento, prestigio, bienes materiales, y que se me mire con respeto; ¡No nada de eso que va! mis sanas intenciones eran ayudar al pueblo.

Quien se ha enredado en la política, y ya ha logrado su objetivo, puede salir después con lo siguiente: “En cuanto me di cuenta de que los políticos solo buscan lo suyo, yo me retiré”; y los ingenuos se creen las suaves palabras del pseudo ministro que así actúa.

El punto a tratar en este post, es la no voluntad de Dios, no la mía, sobre el no involucrarse en los negocios de la vida; cuanto más, si se ha recibido llamado de parte de Dios. Esto lo dice la Biblia, y porque lo dice la Biblia debe ser acatado; le guste a quien le guste, y a quien no le guste, pues un día estará enfrente de su Creador, y a Él se le rendirá cuentas por no a acatar su voluntad declarada previamente en su palabra.

Se debe ser un cristiano ingenuo en las Escrituras, o falto del temor de Dios según aplique; para comerse una mentira como la ya explicada. La pregunta seria la siguiente a tratar: ¿Que lleva a un cristiano con “llamado” a desobedecer la palabra de Dios, y terminar involucrados en la política?

La Palabra de Dios nos dice, por boca de nuestro mismo amado Jesús de Nazaret, que al partir Él en su ascensión no nos dejaría solos; sino que el Él Espíritu Santo seria nuestro guía, y que sería Él, quien nos redargüiría de pecado, de justicia y de juicio.

2. El Espíritu Santo guía los pasos de los que son de Cristo

Lo digo todo el tiempo, y lo repito, porque sé que daré cuentas a Dios de no hacerlo. Muchos son los que se esconden detrás de un traje, de un nombre ministerial, y del mismo nombre de Jesucristo. Cuando hay temor de Dios se obedece a su palabra. Cuando se tiene temor de Dios, uno se sujeta a su palabra. Cuando hay temor de Dios, el único deseo en el corazón de a aquel siervo, o sierva, es sin pensarlo, el agradar al que le tomo por soldado. Cuando un siervo de Dios tiene como su único objetivo la salvación de las almas, se ocupará en ello, y de los negocios de la vida se harán cargo otros. No se puede ser un siervo de Dios, y servir al mismo tiempo al deseo de enriquecer la cartera.! ¡Mas claro es imposible!

3. No se puede servir a dos señores

“Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.” Mateo 6:24.

La voluntad de Dios es, que roguemos a Él por nuestros gobernantes, no que nos involucremos en los negocios de la vida.

La política, defensa por los animales maltratados, medidas para cuidar el medio ambiente, defender los derechos de las mujeres y niños, etc. Dios, por medio de Su palabra, nos dice que debemos ser buenos ciudadanos, debemos rogar por los que gobiernan los países; pero no pide que se involucre en los negocios de la vida, cuanto más si se ha recibido un llamado de parte de Dios.

No estoy en contra de preocuparnos por el medio ambiente, y acciones buenas para una mejor sociedad; me refiero al hecho de haber recibido un llamado de parte de Dios, y en lugar de meterse más en la palabra de Dios, se invierta más tiempo en los negocios de la vida en donde el que ha llegado hasta este punto por intereses personales lo hizo. 

4. El siervo de Dios no se involucra en la política

Génesis 41. 38:” Y dijo Faraón a sus siervos: ¿Acaso hallaremos a otro hombre como éste, en quien esté el espíritu de Dios?

La historia de José es hermosa, y nos deja varias enseñanzas; pero se cae en un error de interpretación bíblica, cuando se toma esta historia para apoyar la postura no bíblica de poder ejercer liderazgo político y liderazgo espiritual a un mismo tiempo.

El llamado de parte de Dios, no tiene como fin los negocios de esta vida; sino hacer conocer la buenas nuevas de salvación para rescate de los perdidos sin Cristo. Todo cristiano, sin un previo llamado de parte de Dios; se puede involucrar en cualquier puesto secular, siempre que no haya recibido un llamado de parte de Dios para Su servicio.

Concluyo: bíblicamente, si usted no tiene un llamado de parte de Dios, pero es de su agrado la política, no va contra la Biblia; pero si usted es un siervo, o sierva de Dios, y ha recibido llamado para ser soldado (a) de Jesucristo en esta tierra; bíblicamente usted no puede, no debe, es contra la voluntad de Dios el involucrase en la política.

Si usted siente que Dios le ha llamado, no importa el ministerio que haya recibido de parte del Señor; pero sabe que Dios lo eligió para servirle a Él y a Su obra con temor de Dios busque las respuestas a sus dudas en la Santa Palabra de Dios; El Espíritu Santo lo guiara.

Preparémonos en santidad para recibir al Amado de todas las naciones: Jesús de Nazaret

Por:

Lourdes Rangel Ministries

lourdesrangel7@yahoo.comwww.lourdesrangel.com


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