PESCADORES ATRIBUYEN A DIOS SU RESCATE TRAS NAUFRAGIO DE SU EMBARCACIÓN

Un grupo de pescadores cuya embarcación se hundió la madrugada del domingo durante una jornada de pesca en el Caribe dice que Dios es responsable de su rescate.

Los pescadores de la embarcación pasaron dos horas en el mar luego de que se hundiera su bote pesquero Crystal Eye cerca del suroeste de Tobago en plena noche, poco después de la medianoche. Los hombres a bordo que sobrevivieron eran el capitán  James Kirwan, de 59 años; Jerome Nicome, de 63; Kyle Dyer, de 31; Azim Baksh, de 35; y Keston Frederick, de 36, que agradecen a Dios que haya respondido a sus oraciones y los haya mantenido con vida.

Nicome dijo al Newsday (Periódico de Trinidad y Tobago): «Gracias a Dios, todo el honor, la gloria y la alabanza. Cualquiera que me escuche ahora, confíe en Cristo. Se lo digo, porque Él es quien nos ha salvado. Dios nos permitió entrar en el barco que nos salvó. Nadie nos vio ahí fuera«.

Dyer dijo: «Las aguas estaban agitadas, muy agitadas. Si no fuera por Dios, hoy no estaríamos vivos».

A pesar de la gélida temperatura del agua, los hombres flotaron a la deriva, durante dos horas, gracias a sus chalecos salvavidas antes de que una embarcación bahameña, el Siem Spearfish, tropezara con los asustados pescadores y los sacara a flote.

Alrededor de las 2:00 am la embarcación de las Bahamas dejó caer uno de sus botes salvavidas y los hombres fueron trasladados al puerto de Scarborough, donde el personal médico trató a Frederick por hipotermia, aunque ninguno de los hombres requirió hospitalización.

Por: Camilo Llanos

Universidad Jorge Tadeo Lozano

@camilo1030juan

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