(Por Alberto Cabezas, periodista)
En línea con las enseñanzas bíblicas y la importancia de orar por las autoridades y gobernantes, el Consejo de Oración Nacional (CON), entidad vinculada a la Federación Alianza Evangélica Costarricense (FAEC), ha convocado a un esfuerzo conjunto de clamor por Costa Rica. Esta iniciativa tiene como objetivo promover la paz y el bienestar del país, así como detener la ola de criminalidad que amenaza a la sociedad costarricense.
El domingo 2 de julio se ha designado como el día en el que las iglesias y sus pastores se unirán en oración por Costa Rica. Siguiendo una visión sencilla, el coordinador del CON, Jorge Luis Soto, sugiere que cada pastor destine unos minutos del culto dominical para elevar peticiones al Altísimo en favor de la nación.
La intención detrás de este llamado es facilitar la participación de todos, sin depender de horarios específicos, guías o emisoras radiales. Para el apóstol Jorge Luis, si el país prospera en el ámbito espiritual, social, económico y político, los beneficios se extenderán a todos los que habitan en él. Por ende, es de interés y conveniencia orar por Costa Rica y su desarrollo integral.
Los motivos de oración son diversos y se alienta a cada iglesia a abordarlos según su discernimiento. No obstante, el CON ha propuesto algunos temas prácticos sobre los cuales centrar las peticiones. Entre ellos, se destaca la protección de la niñez y la juventud, que están siendo afectadas por la influencia negativa del narcotráfico en suelo costarricense.
Asimismo, se busca detener el incremento alarmante de los índices delictivos y promover una mayor efectividad en la seguridad ciudadana. El sector agropecuario también está incluido en estas peticiones, buscando que la tierra produzca abundantes frutos y que los agricultores prosperen en sus cosechas.
En cuanto a la industria y el comercio, se espera que Costa Rica pueda exportar sus productos, lo cual contribuiría a mejorar el empleo en el país. Las zonas francas, que desempeñan un papel relevante en la productividad, la exportación y la entrada de divisas, también deben ser objeto de oración.
Además, se insta a interceder por los miembros del Poder Ejecutivo, para que tomen decisiones prudentes en cada ministerio del Estado. El gabinete y el presidente de la República necesitan recibir sabiduría divina en todas sus acciones. Especialmente se requiere urgencia en ministerios como Educación, Salud, Seguridad y Transportes, que se enfrentan constantemente a conflictos complejos que requieren paz y soluciones justas.
La Asamblea Legislativa y sus diferentes fracciones costarricenses también necesitan ser incluidas en las peticiones, con el fin de que sean un órgano productivo que promueva leyes en beneficio del país y no en función de intereses partidistas. No podemos olvidar tampoco al Poder Judicial, el cual juega un papel fundamental en la democracia costarricense. Es necesario que los ciudadanos mantengan su confianza en este pilar, y para ello, se solicita que los magistrados actúen con sabiduría, templanza y honestidad, para que la justicia y la veracidad prevalezcan en sus decisiones, sin que se manche su imparcialidad con la sombra de la corrupción.
En conclusión, el Consejo de Oración Nacional, a través de la Federación Alianza Evangélica Costarricense, hace un llamado a todos los creyentes y ciudadanos a unirse en oración el 2 de julio por Costa Rica. En medio de los desafíos que enfrenta la nación, es a través de la intercesión que se espera encontrar puntos de acuerdo, superar obstáculos y promover el bienestar integral de la sociedad costarricense.