Javier Rodriguez – Colegio Americano, líder en educación cristiana

Como Director de la Institución académica, reconoce que gracias a DIOS y a su planta de personal, han sido muchos los cambios que se han logrado realizar; sin embargo, lo mejor está por venir.

Desde su fundación, en 1869, hasta nuestros días, el Colegio Americano ha apuntado hacia una educación con excelencia y así está estipulado en la misión. Parte de ella dice así: “Formar ciudadanos autónomos, capaces de transformar la realidad en procura de una sociedad próspera de paz con justicia social, con fundamento en los principios cristianos reformados, respeto por los derechos humanos y la democracia”. Y es que por sus aulas, se han formado personalidades importantes del país, tal es el caso de Enrique Olaya Herrera, Luis Carlos Galán Sarmiento o una de las hijas del General Rafael Uribe, por nombrar algunas.

Así lo han implementado cada uno de sus directivos en las diferentes épocas. Actualmente, quien lidera el colegio es el Reverendo Javier Rodríguez Sanín. Él decidió apartar unos minutos para dialogar con nosotros.esde su fundación, en 1869, hasta nuestros días, el Colegio Americano ha apuntado hacia una educación con excelencia y así está estipulado en la misión. Parte de ella dice así: “Formar ciudadanos autónomos, capaces de transformar la realidad en procura de una sociedad próspera de paz con justicia social, con fundamento en los principios cristianos reformados, respeto por los derechos humanos y la democracia”. Y es que por sus aulas, se han formado personalidades importantes del país, tal es el caso de Enrique Olaya Herrera, Luis Carlos Galán Sarmiento o una de las hijas del General Rafael Uribe, por nombrar algunas.

“En el año 1997 asumí la Presidencia de la Junta Directiva del Colegio Americano, en el año 2000 pasé a ser el rector hasta el 2005, y luego se creó el cargo de Director y yo quedé ahí” dijo.

A partir de ese momento, según palabras del propio Javier Rodríguez, se empezaron a hacer unos cambios impresionantes. Recuerda que para esa época, empezaron a hacer la transición de los cursos de mecanografía a los cursos de computación. Con relación a los logros actuales, dice lo siguiente: “Se construyó un predio de tres pisos para bachillerato que solo se pudo terminar este año; eso ha potenciado al Colegio Americano”.

Indicó que parte del éxito de la institución se debe a la contratación de personal. “Creo que el secreto de nuestra empresa es el personal que labora aquí. El proceso para que una persona entre a trabajar es bastante fuerte pues tiene muchos filtros, pasan por psicólogos, entrevistas, etc. Bueno, creo que tenemos un personal excelente”.

Y es que esa forma de pensar le ha permitido graduar a estudiantes bien capacitados y que los hace bastante competitivos para los exámenes del Icfes. Eso ha hecho que muchos ingresen a las mejores universidades, como por ejemplo a la Universidad Nacional. “Tenemos estudiantes en los Estados Unidos haciendo intercambio” sostuvo. Además agregó: “Mantenemos la enseñanza en valores, dicen por ahí que mente sana, cuerpo sano, y espíritu sano también. Si un estudiante es buen intencionado moralmente, creo que puede rendir más y bueno, a eso le apostamos; Esto nos ha dado resultado”.

El Colegio Americano tiene, entre sus objetivos, consolidarse como una organización educativa inteligente y eficaz, caracterizada por los fundamentos cristianos reformados, su sistema de calidad, el profesionalismo de sus servidores, y la integridad de su comunidad. Y lo están logrando con el paso de los años. Sus cinco prioridades con respecto a su estudiantado son: Formar ciudadanos capaces de transformar su realidad a partir de sus altas competencias académicas con énfasis en inglés, sociales, artísticas y deportivas, siendo críticos y reflexivos, basados en principios cristianos; buscar el crecimiento profesional, personal y humano de sus empleados, y el bienestar de la comunidad en general; servir a través de recursos humanos calificados, motivados, responsables, y con elevada vocación de servicio; ofrecer a los usuarios instalaciones adecuadas para desarrollar las actividades formativas en condición de seguridad, comodidad y orden; y retribuir el aporte que realiza la Iglesia Presbiteriana de Colombia, en términos de eficiencia y economía.

Aparte de lo académico, el Colegio Americano se ha esforzado por mejorar sus instalaciones e incluso, adecuar otras para cada uno de sus estudiantes. Hace dos años, adquirieron una finca en el municipio de Tena (Cundinamarca). Consta de 14 hectáreas y ya cuenta con restaurante. A comienzos de este año 2016 quedó habilitado el sitio para hacer convivencias y campamentos.

Pero dejemos que él mismo lo cuente: “Hemos estado invirtiendo tremendamente en esa finca. Allí hemos construido casas, un Outsourcing Trading, que es un espacio que lo hemos llamado “Amaraca” que era una pronunciación que tenían los indígenas nuestros de decir “Amaraca” en vez de América y ahí vamos a llevar algunas empresas para formar a su gente. Es una especie de laboratorios empresariales para que la gente se ponga la camiseta, para detectar cuáles son los líderes positivos y negativos y saber las actitudes de cada uno. Creemos que esto no hay en Bogotá y va a ser un impacto”.

Realmente, se trata de un proyecto social para niños y jóvenes. También han empezado un trabajo de agricultura orgánica y tener, allí en la finca, como una granja y que no solo sirva para asuntos de religión sino que también sirva para enseñarle biología a cada uno de sus 2200 estudiantes. Es como un laboratorio de ciencias naturales y ciencias sociales. En ese aspecto, han comprado un telescopio para, en las noches, observar las estrellas. “Estamos llenos de sueños y grandes proyectos” dice Javier Rodríguez con bastante entusiasmo.

Asegura que DIOS está con él y con todo su equipo. Sostiene que se están esforzando por dar la mejor educación a los estudiantes en todo sentido: moral intelectual y emocional. En la parte del inglés, han mejorado mucho como también en la tecnología.

Finalmente, dice cómo ve el colegio en 5 años: “Veo un colegio más libre de problemas económicos, que tengamos los medios para hacer inversiones verdaderamente importantes en educación”.

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“Creo que el secreto de nuestra empresa es el personal que labora aquí”